Una hermanita.

El primer natalicio que hice fue para Valentina. En aquel momento yo ni siquiera sabía que a este tipo de recordatorios del recién nacido se le llamaba así. Dos años después, Valentina ha tenido una hermanita y su abuela nuevamente me ha pedido el correspondiente natalicio. 

Lo quería igual que el de su primera nieta, pero diferente. Así que le propuse algunos pequeños cambios: la forma del cuadrito y la dirección en la que vuela la cigüeña. El color de la tela lo escogió la mami. El planeta de flores lo hemos conservado, pues las hermanas van a compartir la habitación.

Os voy a recordar cómo era el cuadro de la hermana.

Seguimos recordando, con lo que os dejo la fotografía de la decoración de la habitación.

Y por esta semana más, que paséis un fin de semana estupendo!!!